El poder de vaciar la mente: una guía para la claridad mental

Si vacías tu mente, priorizas tu mente.

Episodio 312

¿Necesitas claridad en tus ideas y pensamientos?

Ese es el tema principal del programa de esta semana, donde aprenderás cómo crear espacio para la reflexión y la creatividad vaciando tu mente.

 

Suscríbete al podcast:

 
 
 

Índice del programa

  • (07:25) ¿Qué es un vacío mental?

  • (09:42) La neurociencia de vaciar la mente

  • (14:56) 1 | Crea espacio para escribir

  • (17:24) 2 | Hazte grandes preguntas

  • (21:30) 3 | Utiliza multimedia

  • (23:54) Recomendación: herramienta

  • (25:31) 4 | Usa tus propias palabras

  • (27:19) 5 | Sé curioso y valiente

  • (28:12) 6 | No busques la perfección

  • (29:16) Qué hacer con tus notas

  • (30:55) Resume

  • (33:26) Tu plan de acción

  • (35:08) ¡Nos escuchamos muy pronto!

 
Si vacías tu mente, priorizas tu mente.
 
 
  • Quique: ¿Necesitas claridad en tus ideas y pensamientos? Ese es el tema principal del programa de esta semana donde aprenderás cómo crear espacio para la reflexión y la creatividad vaciando tu mente.

    Jeroen: Bienvenidos al nuevo episodio de KENSO, el podcast donde descubrirás cómo vivir la efectividad para ser más feliz. Yo soy Jeroen Sangers, aprendiz en captar menos, pero con más calidad.

    Quique: Y yo soy Quique Gonzalo, aprendiz en poner todo lo no prioritario a un lado. Jeroen, cuando hablamos de capturar, ¿qué significa? Porque esto es un verbo interesante.

    Jeroen: Capturar es básicamente tener esta casa mariposas para tus ideas. A veces tenemos muchas ideas, muchos pensamientos, y tantos que se nos escapan al final. Yo, si no capturo, si no cojo esta idea que tengo por la mañana, por la tarde ya no me recuerdo, porque ya he tenido tantas experiencias más que ya no me recuerdo de estas ideas. Este para mí es captar, es plasmar una idea que tengo en mi cabeza y aún más allá, vamos a ver después, pero no solo es capturar, sino es ampliarlo un poquito.

    Quique: Sí, porque a veces, en nuestro día a día, cuando tenemos más trabajo del que nos podemos llegar a imaginar, nuestro rendimiento puede llegar a disminuir de manera drástica. Y es en esos momentos donde puedes sentir la necesidad de coger y acelerar, pisar ahí a tope. ¿Sabes qué sucede? Que te puedo decir que en la mayoría de los casos esa no es la solución correcta. Para volver a avanzar, lo primero es que puedas calmar tu mente. Es decir, sentirnos estancados es una señal de que hemos sobrecargado nuestros pensamientos o nuestro sistema, si quieres ver a nuestro cerebro como un ordenador. Y es probable que por dentro tú tengas ese debate interno en el que empieces a pensar, claro, yo había planificado a primera hora y había priorizado, ¿y ahora qué tendría que hacer? ¿Debo enfocarme en el problema que me acaban de asignar o en el proyecto A1 que vence la próxima semana? ¿Puedo posponer esas tareas pequeñas un día más o eso causará una crisis esta tarde? Quizá mejor me concentro en una sola tarea, cualquiera que sea, o me detengo para planificar de nuevo cómo evitar este desorden en el futuro. ahí, decirnos a nosotros mismos, acelera en medio de esta confusión, lo único que va a hacer es añadir más estrés al caos. Lo que de verdad necesitas es ir poco a poco pausando tu pensamiento, frenando, para poder identificar qué es lo que necesitas hacer en este momento. Y solo entonces podrás actuar de manera efectiva. Lo interesante aquí es que entran dos flujos de trabajo al mismo tiempo que deben de procesarse de manera paralela. Por un lado, el que tengas esa calma, y esa calma lo que te va a ayudar es a tener la perspectiva para volver a priorizar lo que tienes por delante. Así que, Jeroen, ¿Cuál es la manera más sencilla de ordenar todos esos runrunes, todos esos pensamientos, todas esas ideas, todos esos marrones que nos mandan de última hora, jefes, compañeros, clientes?

    Jeroen: Ya hemos mencionado un poco al inicio, ¿no? Captúralo. La manera más sencilla de ordenar estos pensamientos es escribirlos utilizando oraciones completas en papel. En papel. Después ya hablamos un poco más de este tema, pero haciéndolo así Frases completas en papel te obligan casi a pausarte y esto te ayuda a enfocar tu mente en varias formas. Primero, porque tendrás más claridad sobre los problemas. Ya que te dejas de interrumpir, un pensamiento con otro, que es lo que muchas veces que pasamos cuando no estamos escribiendo, que me salto de idea a idea. No, pero si yo estoy escribiendo mi idea, no tengo espacio más para hacer más. Tengo tiempo para entender el primer problema antes de que aparezca el siguiente. También, al escribirlo, dejo de dar vueltas en círculos, repitiendo los mismos seis pensamientos una y otra vez. Porque una vez que tengo apuntados estos seis pensamientos, pues libero espacio mental para considerar pensamiento número 7, 8, 9 y todos los demás, que son justo ellos que me ayudarán a avanzar. Y finalmente también tendré más claridad sobre qué es lo realmente importante. Porque cuando pongo por escrito un pensamiento y lo utilizo en esta frase completa, lo pongo en el centro de mi atención. Y automáticamente estoy analizando este pensamiento. ¿Lo que estoy apuntando realmente es cierto? ¿Y cómo importante es esto en este momento? Porque algunos problemas que me trastandan en tu mente son críticos, pero otros, muchos, son irrelevantes o incluso incorrectos. Y cuando lo pones por escrito o detallado, tú puedes distinguir más fácil cuál es cuál. Cuáles son las imprescindibles, cuáles son las de verdad y cuáles son las que todavía faltan trabajo, etc. Y por tanto, si sientes que tu trabajo se ha ralentizado mucho, que estás parado, que no sabes cómo continuar, es muy probable que estás bloqueado mentalmente. Y para avanzar más rápido, primero necesitas calmar tu mente. Y por esto, esta técnica de escribir los pensamientos en frases completas te ayudará a organizar tus ideas y a tomar decisiones más rápidamente y permitiéndote así volver a ser más productiva. Es parar un momentito, invertir este tiempo para plasmar estos pensamientos para después poder acelerar.

    Quique: Pues hay una anécdota que a mí me gusta mucho del Premio Nobel de Física de Richard Feynman, que contaba una vez que invitó a su despacho a un historiador que quería entrevistarlo. Y cuando el entrevistador vio los cuadernos de Feynman, expresó su asombro ante aquellos registros tan increíbles del pensamiento de Feynman. Y Feynman dijo, no, no, no. Dice, no, no, no. Dice, no son un registro del proceso de pensamiento. Dice, los cuadernos son mi proceso de pensamiento. Dice, de hecho, trabajo en el mismo papel. Y entonces le contestó al historiador. Dice, bueno, el trabajo de investigación lo has hecho en tu mente, pero el registro de este trabajo sigue estando aquí. Y contestó Feynman, no. En realidad no es un registro, es el trabajo en sí. Tienes que trabajar en papel y el papel está aquí. Así que por eso la importancia de poder realizar ese vaciado mental, ese vuelco en el que todas esas ideas, emociones, sentimientos que ahora mismo están pululando por tu cabeza, buscando un lugar, llamando tu atención, el mejor lugar al que puedes volcarlos, al que puedes vaciarlos, es esa hoja de papel para que te puedan dejar con esa tranquilidad de centrarte en lo prioritario. Así que, Jeroen, ¿qué es ese vacío mental del que hablamos?

    ¿Qué es un vacío mental?

    Jeroen: Pues el vacío mental, la definición oficial, que nosotros, no oficial, no sé si existe, pero la definición que nosotros utilizamos es el vaciar la mente, es el acto de expresar y registrar de manera exhaustiva y acrítica los propios pensamientos e ideas sobre un tema en particular. Esta sería la definición. El acto de expresar y registrar de manera exhaustiva y acrítica los propios pensamientos e ideas sobre un tema en particular. Y esta práctica implica liberar espacio mental al escribir todo lo que pasa por tu cabeza, que no solo ayuda a organizar tus pensamientos, sino que también reduce el estrés y mejora la claridad mental. Porque al escribir estás creando un registro externo de tus pensamientos y lo que permite analizarlos con mayor objetividad. Lo sacas por tu cabeza y es como criticar un escrito de otra persona, que es mucho más fácil que los tuyos, ¿no? Me metes esto en tu mente, tú no critiques, ¿no? Y es una técnica que no es nada nuevo. Hay muchísimos escritores, pensadores famosos que han utilizado esta técnica de vaciar la mente para mejorar su creatividad y productividad. Ya hemos visto el ejemplo de Feynman. Pero también conocemos todos los cuadernos de Leonardo da Vinci, que estaban llenos de bocetas, ideas y observaciones. Así, Leonardo podía explorar estos conceptos complejos y desarrollar sus innovaciones. Yo creo que la idea detrás de esto, para explicarlo a través de una metáfora, es imagínate que tu mente es como un escritorio desordenado, ¿no? Y cuando este escritorio está lleno de papeles y objetos, será difícil encontrar lo que necesitas y concentrarte en una tarea específica. Pero al vaciar la mente es como limpiar este escritorio. Y al escribir tus pensamientos estás organizando y despejando el espacio mental, lo que te permite trabajar de manera más eficiente y también más efectivo. Y por tanto, vaciar la mente y escribir tus pensamientos, no solo es una técnica útil para mejorar la efectividad, sino también una herramienta muy poderosa para el autoconocimiento y la reflexión. Porque al librar este espacio mental, tú puedes enfocarte mejor en lo que realmente importa y tomar decisiones más informadas. Y todo este proceso está avalado por la neurociencia. ¿Verdad, Quique?

    La neurociencia de vaciar la mente

    Quique: Eso es porque al final es muy importante saber cuáles son las bases científicas de cada uno de los hábitos que ponemos en marcha para ver si de verdad es un truco o es un hábito. ¿Sabéis qué sucede? Que al final ninguna de las cosas que nosotros podamos escribir o volcar va a ser una copia exacta de aquello que estábamos pensando. Lo que sucede es que cuando tomamos notas, lo que hacemos es usar la escritura, y además, si lo haces de manera analógica, tu conexión cerebro-humano, como una herramienta para pensar, digerir y dialogar con esas frases interiores que tenemos. Es decir, no solo plasmando ideas preconcebidas, sino que todas esas emociones, todas esas sensaciones o todas esas tareas las pasamos por un filtro, que es nuestro propio pensamiento, para, al escribirlas, que ya estén en cierto modo procesadas. Y es aquí donde nuestra mente contiene una misión de lo más interesante, y es el hacernos sentir bien. Y para lograrlo, a menudo, lo que hace es ignorar las inconsistencias en nuestro razonamiento. Por eso, al leer o pensar algo, es probable que lo interpretes según tu contexto, según tu historia, según tus creencias. De tal modo que un argumento coherente necesita ser expresado a través del lenguaje. De hecho, una de las cosas más interesantes que podemos hacer es volver a escuchar el episodio 311, donde hablábamos con Luis Castellanos sobre el origen de la palabra y del mismo lenguaje. Porque solo cuando escribimos, nuestra mente se fija lo suficiente como para poder discutir de manera independiente lo que hemos pensado, lo que nos ha emocionado, lo que nos ha perturbado. Esa escritura nos permite observar el argumento con una distancia que nos hace que sea necesaria esa distancia para poder analizar sin que la idea ocupe los mismos recursos mentales que necesitamos para evaluarla. Por esta razón, cualquier idea, ya sea compleja o sea sencilla, es importante que la digiramos y que la escribamos.

    Jeroen: Cuando apuntamos algo, cuando ponemos algo por escrita, pasa algo en dos niveles. Primero, lo más obvio, que es, estamos almacenando de forma externa la información y después estamos codificando. El almacenamiento externo es fácil de entender. Estás guardando la información, tu idea, tu pensamiento, en un lugar accesible, como un trozo de papel que tú puedes revisar en cualquier momento o incluso puedes compartir con otras personas. Puedes colocar este papel en tu oficina, en la nevera, etc. Y no necesitas ser un experto para saber que recordarás algo mejor si ves un recordatorio visual todos los días. Este es el primer beneficio. Después hay otro proceso y es más profundo, es la codificación. Y la codificación es el proceso biológico por el cual lo que percibimos llega al hipocampo de nuestro cerebro, donde se analiza. Y a partir de ahí se decide qué es lo que se almacena en nuestra memoria a largo plazo y qué se descarta. Y escribir tu información, tus pensamientos, mejora este proceso de codificación. En otras palabras, cuando tú pones algo por escrita, es más probable que lo recuerdes. Esther, todos sabemos de las chuletas que decimos en el instituto, ¿no? Porque muchas veces el acto de crear la chuleta hace que ya no necesites la chuleta. porque ya tienes pensado cómo expresarlo, cómo ponerlo además en un formato más mínimo posible para que no se vea mucho. Estás interactuando con esta información y trabajando así con la información que estabas estudiando ayuda a codificar la información en tu mente y al final no necesitas esta chuleta. Y finalmente, hay un estudio muy interesante de la Universidad de California, de Los Angeles, el UCLA, que han demostrado que cuando apuntamos nuestros pensamientos e emociones, puede disminuir la actividad de la amygdala, que es la región del cerebro asociada con el procesamiento de emociones y el miedo. Esta parte que siempre está vigilando, que hemos mencionado muchas veces en este podcast. y cuando externalizamos nuestros pensamientos estamos, en efecto, liberando espacio mental y también porque disminuir la actividad en la amígdala ponemos más tranquilos, más centrados en la tarea que tenemos por delante. Por lo tanto, hemos visto que la ciencia convale también que vaciar la mente, anotar nuestros pensamientos no solo es una práctica útil, Pero algo que realmente tiene sentido, porque cuando liberamos nuestra mente de la sobrecarga cognitiva, reducimos el estrés, mejoramos la concentración y fomentamos la creatividad. Y así que, ya sabes, la próxima vez volvemos a repetir el mismo mensaje, que te sientes obligado, pues toma un momento para escribir lo que pase por tu mente, porque tu cerebro tardecerá. Entonces, vamos a la práctica. ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo se hace esto?

    1 | Crea espacio para escribir

    Quique: Pues se hace de una manera muy sencilla. O sea, al final hay una serie de pasos que son los que tenemos que trabajar y vamos a dividirlo en seis pasos. El primero de estos pasos para hacer el vaciado mental es crear un espacio para escribir, buscar ese espacio donde vayas a volcar, donde vayas a capturar toda esa información. Ese espacio, pues los que nos estáis viendo a lo mejor por YouTube, yo os enseño lo que utilizo. Tengo un cuaderno de DIN A4 muy grande, siempre a mi lado, para poder colocar en él y volcar en él todas aquellas emociones e ideas que vayan surgiendo. Es como aparcarlas de momento para seguir centrado en lo que estoy centrado. Luego ya veré qué hago con ellas. En ese lienzo grande, ahí lo que voy a hacer es volcar todas mis ideas, mis emociones, mis pensamientos, las tareas que me lleguen, sin ninguna restricción. Es decir, simplemente, como hablábamos antes, hacemos ese proceso de escritura que me permita descargar y liberar el espacio de mi cerebro. Puede ser, como habéis visto en mi caso, un cuaderno grande, puede ser una pizarra blanca, puede ser una aplicación digital de notas… Lo que tú decidas, lo que te sea más cómodo, lo que te sea también más sencillo. La clave es que puedas mantener un lugar donde puedas escribir de manera libre. Y quien dice escribir, También puedo decirte dictar o incluso dibujar para aquellas personas que os sintáis más cómodos. Además, lo que es importante es dedicarle mucho tiempo a este proceso. Es decir, No te conformes con las primeras ideas que vayan surgiendo. ¿Por qué? Porque esas ideas suelen ser las más obvias. Por ejemplo, cuando Jeroen y yo ponemos los títulos para cada capítulo, sabemos que las cinco primeras ideas van a ser las más obvias. ¿Son las mejores? No, porque no nos hemos esforzado, no hemos ido al siguiente nivel. Ahí es donde tú lo que mejor puedes hacer es insistir y seguir escribiendo, incluso, cuando sientas que las ideas están perdiendo calidad. Porque a menudo es en esos momentos de insistencia cuando va a aparecer la idea más brillante, esa que de verdad vale la pena.

    2 | Hazte grandes preguntas

    Jeroen: Vale, segundo consejo para hacer esto es hacerte grandes preguntas, porque si te haces grandes preguntas obtendrás grandes respuestas. Si me hago a mí mismo preguntas superficiales, pues entonces voy a conseguir respuestas superficiales. Si mi nivel de reflexión es cosas como ¿qué voy a comer hoy? o ¿qué película quiero ver esta noche? pues seguramente tendrán una respuesta inmediata y de corto alcance. Pero si me hago preguntas grandes como ¿qué es lo que me gustaría lograr en el próximo año? o ¿qué es lo que realmente me hace feliz? Entonces me obligo a profundizar y reflexionar más. Y al final, si tienes una buena pregunta por delante, y yo de hecho tengo una lista, yo tengo una lista de preguntas para hacerme. Yo estoy capturando, unas cosas que capturo son buenas preguntas y a veces cojo una para ir más profundo. Porque yo sé que cuando me hago una buena pregunta, pues esta pregunta tiene el poder de desafiar mis creencias. Me obliga a cuestionar lo que doy sentado y a considerar otras posibilidades. También, una buena pregunta puede fomentar el autodescubrimiento. Me ayuda a entender mejor quién soy, qué es lo que quiero y para qué. Una buena pregunta también puede generar claridad. Te permite ver con mayor claridad cuáles son tus objetivos y cómo puedes alcanzarlos. Y finalmente, una buena pregunta estimula la creatividad. Te anima a pensar fuera de la caja y a encontrar soluciones innovadoras a tus problemas. Hay muchos ejemplos de buenas preguntas, gente que han hecho buenas preguntas, ¿no? Por ejemplo, Albert Einstein, una de sus preguntas que tenía en su cabeza era, ¿qué pasaría si pudiera viajar a la velocidad de la luz? Y esta pregunta le lleva a desarrollar la teoría de la relatividad y transformando incluso nuestra comprensión del universo. Otro ejemplo, Steve Jobs se pregunta, ¿cómo podemos hacer que la tecnología sea accesible y atractiva para todos? Y esta pregunta fue un catalizador para la creación de productos icónicos como el iPhone o el iPad. Y el tercer ejemplo, Marie Curie, se preguntó, ¿qué es la radioactividad y cómo podemos utilizarla? Y su curiosidad y las preguntas que hizo la llevaron a descubrir elementos radioactivos y a ganar dos premios Nobel. Para nosotros, en KENSO, nuestra pregunta favorita es, ¿para qué? que hemos hecho muchas veces. Para mí es una. Y esto es más poderoso si lo repites. ¿Para qué? Cinco veces. Por ejemplo, tienes un deseo inicial de, quiero ser más millonario. ¿Para qué? Pues para tener libertad financiera. ¿Para qué quieres tener libertad financiera? Pues para no preocuparme por el dinero. ¿Y para qué no quieres preocuparte por dinero? Para poder dedicarme a lo que realmente me apasiona. ¿Y para qué quiero dedicarme a lo que realmente me apasiona? Pues para sentirme realizado y feliz. ¿Y para qué? Pues para vivir una vida plena y con propósito. Ves que como voy entrando con los para qué es cada vez más profundo y al final llega a una cosa muy profunda que es realmente lo que me motiva. Y desde aquí ya puedo desarrollar mi plan de acción, porque lo que realmente quiero es vivir una vida plena y con propósito. Como alternativa, podemos cambiar el PARA QUE por el PORQUE. Este nos ayuda a encontrar una causa, porque miramos hacia atrás. PARA QUE es más hacia el futuro. Si preguntamos PORQUE, podemos poner una causa. Por ejemplo, me siento estresado. ¿Por qué? Pues porque tengo demasiadas tareas pendientes. ¿Y por qué? Porque no he podido organizar bien mi tiempo. ¿Por qué? Porque he estado procrastinando. ¿Y por qué has estado procrastinando? Porque me siento abrumado por la cantidad de trabajo. ¿Y por qué? Porque no he pedido ayuda ni he delegado mis tareas. Y así poco a poco entras en la causa al raíz de todo este problema. Quique, antes has mencionado que no solo tenemos que escribir, sino que podemos dibujar. ¿Puedes explicar un poco más sobre esto?

    3 | Utiliza multimedia

    Quique: Sí, este es el tercer punto y es que utilices los medios que tengas a tu disposición. Según un estudio publicado en la revista Psychological Science, escribir a mano, en lugar de teclear, activa más áreas del cerebro relacionadas con el pensamiento crítico y la retención de información. Esto se debe a que la escritura manual implica un proceso más complejo de coordinación motora y cognitiva, lo que fortalece nuestras conexiones neuronales. Lo que viene siendo, si quieres recordar algo, es mejor que lo escribas a que lo te crees. Además, escribir a mano es una tarea que se realiza de manera más despacio, más lenta, pero hace que las personas tengan que ser más selectivas en lo que escribimos. ¿Qué sucede? Que los investigadores también encontraron que los procesos involucrados en escribir a mano lo que nos dan es que las personas que escriben tienen una mayor comprensión del material. Pero, como decíamos al principio, no te limites solo a escribir, porque a veces las palabras no van a ser suficientes, no van a ser aquello que a ti mejor te permita expresar lo que sientes o lo que piensas. Busca alternativas. Además de escribir, dibuja tus ideas. Y no importa si, como yo, hacéis dibujos que hasta un niño de cinco años los haría mejor. Lo importante es que son tus dibujos. Y para personas visuales, los dibujos nos ayudan a visualizar mejor los conceptos de una manera diferente y a desbloquear nuevas perspectivas. Desde luego que también, si eres una persona más auditiva, aprovecha de grabar tu voz. ¿Cuántas personas se cuentan a sí mismas sus pensamientos? ¿Cuántas personas van a una reunión y cuentan su libro? Pues porque en el fondo necesitan escuchar su pensamiento. Pues piensa que a veces también hablar en voz alta puede ayudarte a reordenar tus ideas de tal manera que a lo mejor la escritura no llegue a ese nivel. Así que recuerda, hay otras alternativas que también potencian las conexiones neuronales, como pueden ser los dibujos o como puede ser escuchar tu propia voz.

    Recomendación: herramienta

    Jeroen: Fantástico. Otra manera de hacerlo es a través de juegos. Tu porro es el lugar para ayudarte a pensar y hay un juego que a nosotros nos ha enviado Edith López, que es este juego aquí, se llama Open Your Box, que es un juego para descubrir tus emociones, que aprender sobre la inteligencia emocional. Y si lo hago, está lleno de tarjetas con, como he dicho antes, buenas preguntas. En este caso, ¿qué situaciones te despiertan con pasión? Son buenas preguntas. Además, en el formato del juego, yo ahora solo he cogido una de las tarjetas, pero esta tarjeta se puede utilizar. Hay un tablero que se puede utilizar. Y es una forma muy divertida, muy… muy lúdico para trabajar tus emociones y para ayudarte a reflexionar sobre cómo te sientes y para qué te sientes así. Este juego es nuestra recomendación y vamos a sortear uno entre los miembros de KENSO Círculo. Y para los miembros de KENSO Círculo, para participar simplemente en Patreon, donde veis publicado este episodio del podcast, lo único que hay que hacer es dejar un comentario y compartir con nosotros tu mejor pregunta para la reflexión. Y entre todos los candidatos que han participado, pues vamos a sortear este fantástico juego para descubrir nuestras emociones.

    Quique: Pues ya tenemos ese juego, así que si tú quieres participar, ya sabes, apúntate a KENSO.es/circulo para ser patrón de KENSO y desde ahí poder dejar tu comentario en el episodio de esta semana.

    4 | Usa tus propias palabras

    Vamos a por el cuarto de las recomendaciones. En este caso, hablamos, igual que antes de elegir tu mejor herramienta, que elijas tus propias palabras. Y cuando capturamos información, una cosa es cómo llega y otra cosa es cómo tú la traducirías. Un ejemplo muy sencillo, imagínate que a ti te llega algo en un idioma que no es el propio y lo que haces es traducirlo a tu lenguaje. Pues esto es lo mismo. Es fundamental que utilices tus propias palabras a la hora de escribir, a la hora de escucharte y grabarte, lo que haga falta. Porque esto no solo hace que el proceso sea más auténtico, sino que también facilita la conexión emocional con tus pensamientos. De tal manera que, al usar tu propio lenguaje, lo que estás haciendo es generar un diálogo interno mucho más genuino y significativo que va a ayudar a que proceses mejor y captures mejor esa información.

    Jeroen: A mí me costará mucho aprender esta regla. Yo tengo aquí mis cuadernos de autoría del instituto y cuando los leo, cuando los miro, pues yo las cosas que tengo apuntado en mis cuadernos, mis notas de cuando estaba estudiando, básicamente eran únicamente estas frases que yo apunto cuando mi profe me dice, apunta esto. Y yo de forma literalmente apuntaba sus palabras. Y por tanto, yo creo que es lo mismo que cuando estás leyendo un libro, subrayando un texto para decir, este es importante. Pero si no lo trabajas, no lo vas a acordar. Sí que es importante a veces saber cuál es exactamente el texto literal, la definición de un concepto, por ejemplo. Pero si yo lo que apunto para acordarme, lo tengo que hacer mío. Y solo hace bastante reciente he empezado a hacer esto. Hasta entonces siempre estaba capturando información de las palabras de otros, pero nunca lo hizo mío.

    5 | Sé curioso y valiente

    Siguiente consejo. Ser curioso y ser valiente. No te conformes con lo obvio, que es lo que vamos, que siempre, captura rápido. Por eso es tan importante también buscar este espacio de lo que Quique ha hablado antes. Porque la idea es que cojas una idea principal Pasas más allá del obvio y empiezas a investigar y profundizar en los temas que realmente te interesan a través de estas preguntas a vez de continuar reflexionando. Y además no tengas miedo de hacerte preguntas que pueden tener respuestas incómodas o desafiantes. Obviamente estas son justo las preguntas que más valor aportan. que este incomodidad es justo lo que estamos buscando en este ejercicio de reflexión. Porque solo desde el incomodidad podemos llegar a nuevas creencias o romper nuestras creencias y ir más allá de lo que nosotros hacemos habitualmente.

    6 | No busques la perfección

    Quique: Yo creo que esto es un tema muy interesante porque vamos a ir a ese punto más lejos, vamos a ir a ese punto más valiente, eso sí, sin llegar a la perfección. Porque recuerda que cada obra maestra comienza como un borrador. Y no te preocupes por la perfección cuando vacías tu mente, porque el objetivo es liberar espacio mental y permitir que las ideas fluyan. Esto es como si cogiéramos una gran bolsa y empezáramos a meter ahí toda esa información. Directamente no pienses demasiado, vete a por ello, porque con el tiempo ya irás refinando y puliendo los pensamientos. Primero déjalos salir sin restricciones, es decir, cáptúralos, como os enseñábamos antes en esa hoja de papel, porque luego, Cuando ya tengas esa paralelidad, te va a permitir primero priorizarte y después ya lo que harás es clasificar y trabajar con toda esa información que tú has volcado en esa hoja de papel, en esos dibujos o en esa nota de audio. Así que, Jeroen, ¿qué podemos hacer ahora que ya hemos visto cómo capturar con esas notas capturadas?

    Qué hacer con tus notas

    Jeroen: Claro, y este es un comentario específico para la gente con perfil azul, que tiene tendencia a quererlo tener todo organizado. No hace falta, no hace falta. En principio, el hecho de haber creado esta nota, de vaciar un momento, de haber pensado en papel, ponerla por escrito, ya te ha dado resultado, porque ya tienes la claridad que buscabas. Tenías una idea que seguramente al inicio pensabas que estaba redonda en tu cabeza, este pensamiento, pero al momento de apuntarlo has notado dónde estaban los huecos en la lógica, has ido un poco más allá, has ido profundizando y has llegado a una conclusión. Pues este en sí, todo el proceso en sí, ya tiene mucho valor. Mi primer mensaje siempre es no te preocupes demasiado por mantener todas estas notas organizadas. El proceso de crearlas ya tiene un valor intrínseco. Por lo tanto, si al final de una sesión has generado 5 hojas con notas, 5 páginas de notas, y no tienes tiempo o ganas de procesarlo, pues no pasa nada. Si quieres organizarlos, pues no te compliques la vida tampoco. Simplemente mira si puedes al final de esta sesión apuntar un par de conclusiones de una sola hoja y procesas solo esta hoja. No hace falta todo el texto, todo el viaje que has pasado por llegar a esta conclusión. Mira al final cuál es la acción e intenta hacerlo. Si hay alguna acción, si hay una una conclusión, una frase, pues guarda esto en un sitio que tú quieras, pero no te obsesiones con ordenador, este material que estás creando. El valor está en el proceso.

    Resumen

    Quique: Pues con esto llegamos al final. Y ese es el momento en el que hacemos el resumen, que en el fondo no es nada más que capturar toda la información que hoy hemos estado escuchando en este podcast. Así que, a modo de resumen, hoy hemos tratado acerca de la importancia de poder poner en un lugar seguro todas aquellas ideas, pensamientos, tareas que nos van llegando a lo largo del día y que lo único que hacen es, en cierto modo, esconder o tapar nuestro trabajo, nuestra planificación, nuestra prioridad. Por eso es muy importante que a partir de ahí puedas entender mucho mejor cómo realizar ese vaciado mental. Hemos visto que la neurociencia avala el proceso del vacío mental porque simplemente el mero hecho de anotar los pensamientos digiriéndolos y pasándolos a nivel analógico a un papel, a una serie de dibujos o a tu propia voz, una nota, va a ayudar a que podamos recoger esa información, recuperarla después mucho mejor. Hemos visto seis aspectos esenciales para vaciar mentalmente nuestro cerebro y el primero es buscar ese espacio para escribir. Hemos visto que puede ser ese lienzo grande en el que podamos volcar toda esa información sin miedo, tranquilamente. Hemos visto la importancia de hacernos grandes preguntas para obtener mejores respuestas. Hemos visto también la importancia de utilizar otra serie de medios que podamos tener a nuestra disposición, como puedan ser los dibujos, como pueda ser una tableta para pintar, o como pueda ser, en nuestro propio móvil, grabar una nota de voz. El cuarto punto es que traduzcamos todo aquello que nos ha llegado a nuestro idioma, utilizando nuestras propias palabras, de tal manera que nos quede mucho más claro qué es lo que buscamos, qué es lo que se espera. Y luego, actitudes. La actitud de ser curiosos, de ser valientes, de ir más allá de lo obvio, y eso sí, siempre entendiendo que en esta parte del proceso no buscamos la perfección. Aquí sí que podemos decir más que buscamos vaciar cuanta más cantidad de información mejor, y luego, durante su procesamiento, es donde trabajaremos en esa parte de calidad. Así que ahora es tu momento y tu momento es llevarlo, ponerlo en marcha con un plan de acción.

    Tu plan de acción

    Jeroen: Efectivamente, porque para resumirlo todavía más hemos creado una hoja de resumen que es una hoja, una sola hoja con la información esencial para llevar la información de este episodio a la acción. Porque ya sabes, escuchar un podcast de KENSO y llevarlo a la acción es efectivo. y si también quieres tener acceso a esta hoja de resumen y además tener acceso a un montón de beneficios de KENSO Círculo, por ejemplo, la comunidad de WhatsApp donde cada día estamos hablando sobre los temas que tanto nos apasionan. Forma parte del club de lectura, de libros, de efectividad. Participa también en KENSO Lab donde colaboramos en pequeños grupos en los retos para mejorar tu productividad y este mes justo estamos trabajando en el reto de vaciar la mente Todos los participantes les va muy bien este episodio. ¿Qué más tenemos en KENSO Circulo? Aprendemos juntos de episodios antiguos en el Club de Estudio, los miembros disfruten descuentos en los servicios de KENSO, pueden participar en concursos para ganar libros, aplicaciones y juegos incluso. Y además reciben nuestra eterna gratitud porque son ellos que nos ayudan a mejorar. Entonces si también quieres ayudarte, dirígete a kentsu.es barra círculo. Y hoy un saludo muy especial para María Torres Planells y José Pérez Barros que se han unido recientemente. Pues muchísimas gracias a estos dos y esperamos veros en el grupo de WhatsApp y en todas estas actividades que estamos haciendo con los miembros.

    Quique: una comunidad maravillosa con aprendizajes y gente increíble. Así que ahí te esperamos, una pequeña aportación para poder seguir en marcha con este podcast, que nosotros agradecemos mucho.

    ¡Nos escuchamos muy pronto!

    Outro: Muchas gracias por escuchar el podcast de KENSO. Si te ha gustado, te agradeceríamos que te suscribas al podcast, lo compartas en tus redes sociales o dejes tu reseña de 5 estrellas para ayudarnos a llegar a más oyentes. Y si quieres conocer más sobre KENSO y cómo podemos acompañarte a ti, tu equipo o tu organización en el camino hacia la efectividad personal, puedes visitar nuestra web, KENSO.es. Te esperamos la semana que viene en el próximo episodio del Podcast de KENSO, donde Quique y Jeroen buscarán más pistas sobre cómo vivir la efectividad para ser más feliz. Y hasta entonces, ahora es un buen momento para poner en práctica un nuevo hábito KENSO:

    Quique: Si vacías tu mente, priorizas tu mente.

 

Únete a KENSO Círculo

El club para personas centradas en mejorar su efectividad y vivir más felices.

Un club a tu alcance porque a partir de 1,5€ al mes tendrás acceso prioritario a los episodios del podcast sin publicidad, podrás descargar el superguión para cada episodio, recibirás cada mes un episodio especial donde haremos una reseña sobre un libro de efectividad, puedes participar en KENSO Lab para juntos crear hábitos efectivos, recibirás el newsletter semanal, podrás participar en el grupo de WhatsApp, disfrutarás de descuentos en los servicios de KENSO y de nuestra eterna gratitud por ayudarnos a mejorar.

Otros episodios en el podcast:

Jeroen Sangers

Anfitrión del Canasto. Mentor artesano especializado en la Efectividad 2.0 para personas y equipos de trabajo.

https://jeroensangers.com
Anterior
Anterior

Cómo tratar con personas difíciles

Siguiente
Siguiente

Cómo cambiar tu vida con el poder de las palabras con Luis Castellanos