Tu mente dispersa no es un problema: es el inicio de tu próxima gran idea
Episodio 362
¿Cuándo fue la última vez que te aburriste? Y no me refiero a ese aburrimiento que solucionas con un scroll infinito en Instagram. Me refiero a aburrirte de verdad, a ese estado de vacío mental en el que no sabes qué hacer con tu tiempo y tu cerebro empieza a divagar sin rumbo.
Apuesto a que no recuerdas la última vez que experimentaste ese tipo de aburrimiento.
Hoy vamos a zambullirnos en la paradoja que más me fascina: cómo la mente dispersa, esa que tanto intentamos disciplinar, podría ser en realidad tu recurso más valioso.
Suscríbete al podcast:
Índice del programa
(1:57) La Red por Defecto: el tesoro oculto de tu cerebro
(4:23) Las tres formas de aprovechar tu mente dispersa
(4:55) 1 | La dispersión capturadora
(7:24) 2 | La dispersión masticadora de problemas
(9:53) 3 | La dispersión habitual
(11:12) El aburrimiento como recurso escaso
(12:39) Nuestro nuevo curso: cuando la concentración se vuelve superpoder
(14:15) Una práctica para empezar hoy mismo
(15:55) Cerrando el círculo
Recursos mencionados
El Camino Del Artista: Un curso de descubrimiento y rescate de tu propia creatividad de Julia Cameron | Amazon
Reseña: Hiperfocus de Chris Bailey | KENSO Círculo
Curso online: Mejora tu concentración, haz de la atención tu superpoder | KENSO
Formación para empresas | KENSO
Cursos online | KENSO
Coaching personal | KENSO
Y la música de KENSO gratis para Podcasts y YouTube | Uppbeat
-
Aviso: el transcriptor a veces no nos entiende, pero vosotros seguro que sí.
Disculpa, si lees algún error en la transcripción.Quique Gonzalo:
¿Recuerdas la última vez que te aburriste? Y no me refiero a ese aburrimiento que solucionas con un scroll infinito en Instagram. Me refiero a aburrirte de verdad, a ese estado de vacío mental en el que no sabes qué hacer con tu tiempo y tu cerebro empieza a divagar sin rumbo. Apuesto a que, a lo mejor, no recuerdas la última vez que experimentaste ese tipo de aburrimiento, lo que sí es que vas a ver cómo ese aburrimiento es tremendamente poderoso. Bienvenidos a un nuevo episodio de KENSO, el podcast donde descubrirás cómo vivir con efectividad para ser más feliz. Soy Quique Gonzalo, aprendiz en el noble arte de perder el tiempo de manera productiva. Así que hoy vamos a lanzarnos a esa paradoja que me fascina, y es cómo una mente dispersa, esa que en tanto a veces intentamos disciplinar, podría ser en realidad 1 de tus recursos más valiosos. Y aunque te estés preguntando, oye, pero Quique, eso no se supone que debo concentrarme para ser más productivo, que lo entiendo, porque vivimos una cultura obsesionada con el enfoque, con mantenernos concentrados cada minuto del día, con optimizar cada segundo. Sí, lo entiendo.
Quique Gonzalo:
Lo que sucede es que, paradójicamente, ese enfoque desde fuera nos lo bombardean con notificaciones, actualizaciones, contenido diseñado de manera específica para fragmentar nuestra capacidad de atención. Así que hoy vamos a ir contracorriente. Vamos a explorar por qué en un mundo que idolatra la concentración profunda, tu salvación a veces podría encontrarse en aprender a aprovechar los momentos de dispersión mental. Para ello, hablemos de la red neuronal por defecto, que es el tesoro oculto de tu cerebro. Imagina que tienes un Ferrari aparcado en el garaje. Lo que pasa es que solo lo utilizas para ir al supermercado de la esquina. Así es como la mayoría de nosotros tratamos a la red por defecto de nuestro cerebro. La neurociencia ha identificado 2 modos principales en nuestro cerebro.
Quique Gonzalo:
El modo de atención ejecutiva, que se activa cuando nos concentramos en una tarea específica, y la red neuronal por defecto, que se enciende cuando no estamos haciendo nada. Pero aquí está la revelación que cambia las reglas del juego. Y es que esa red, por defecto, consume el 20 por 100 de la energía de tu cuerpo, mientras que cualquier otro esfuerzo consciente apenas requiere de un 5 por 100. ¿Tiene sentido que algo que consume tanta energía sea simplemente el no hacer nada? No, por supuesto que no. Y es que la red, por defecto, es donde ocurre la magia. Es donde tu cerebro conecta ideas que pueden parecer inconexas, y es donde el cerebro procesa emociones complejas, y es donde también planifica escenarios futuros, y donde, muy a menudo, surgen esos momentos tuyos de inspiración que parece venir de la nada, como cuando estás en la ducha, ¿verdad? Y sin embargo, ¿qué hacemos en cuanto tenemos un minuto libre? Sacamos el móvil. Y es que, según los datos, miramos nuestro teléfono unas 96 veces al día, es decir, cada 10 minutos. ¿Y qué sucede? Que además entre los 18 y 24 años esta cifra se duplica.
Quique Gonzalo:
En cierto modo, con esto anestesiamos de manera sistemática la parte de nuestro cerebro diseñada para la innovación, para la creatividad. Y aunque suene excusa para procrastinar, si no nos concentramos, parece que no avanzamos en nuestros proyectos. ¿Sí? Lo que sucede es que la concentración profunda es esencial para ejecutar tareas complejas. Así que lo que te propongo no es que abandones la concentración, ni mucho menos, sino que reconozcas el valor complementario de tu mente dispersa. Es como respirar. Necesitas tanto inhalar como exhalar. Si solo inhalas, te asfixias. Si solo exhalas, te derrumbas.
Quique Gonzalo:
La efectividad sostenible requiere de ambos, momentos de mucha capacidad de foco y momentos de dispersión mental. Así que vamos a ver 3 formas en las que puedes aprovechar tu mente dispersa. Vamos a entrar en materia para que veas cómo puedes convertir esos momentos en los que tu mente divaga en una ventaja estratégica, y para ello existen 3 formas principales para poder aprovechar ese poder de tu mente dispersa, y cada una, a su vez, contiene su propio superpoder. La primera, la dispersión capturadora. La primera modalidad, esta dispersión capturadora, consiste en darte permiso una o 2 veces por semana para sentarte con un papel y un bolígrafo, es decir, analógico, nada de pantallas. Y dejar que tu mente deambule libremente mientras capturas las ideas que vayan apareciendo, lo que vaya sucediendo, las emociones. Esta práctica me recuerda mucho a las páginas matutinas que propone Julia Cameron en su libro El camino del artista. Cameron sugiere escribir 3 páginas a mano cada mañana sin filtro, sin juicio.
Quique Gonzalo:
Simplemente vertiendo en el papel lo que sea que pase por tu mente. No tiene por qué ser para que luego lo leamos, ni siquiera por ti o por otro, sino como una forma de limpiar nuestros canales creativos. Aquí no hablamos de hacer listas de tareas convencionales, para nada. Estamos hablando de pescar en las profundidades de tu inconsciente. De hecho, hace unos meses, durante una sesión de este tipo, anoté una idea que parecía aleatoria sobre un sistema para mejorar la concentración. De hecho, no le di demasiada importancia en ese momento. Lo que sucede es que hoy esa semilla se ha convertido en nuestro nuevo curso. Mejora tu concentración, hazle la atención tu superpoder.
Quique Gonzalo:
Y es un curso online que ya tienes disponible en KENSO punto es barra curso guion concentración. Te repito, KENSO punto es barra curso guion concentración. ¿Has apreciado la ironía? Un curso sobre concentración que nace precisamente en un momento de mente dispersa. Esta práctica de dispersión lo que hace es que funciona porque desactiva de manera momentánea tus filtros mentales. Tu cerebro, ese ente analítico, ese que siempre está evaluando si una idea es buena o mala, viable o absurda, se relaja y permite que emerjan conceptos que de otra manera quedarían sepultados bajo el peso del juicio inmediato. Haz una pausa ahora mismo. Sí, ahora, detén este podcast, detén lo que estés haciendo y pregúntate, ¿cuándo fue la última vez que me permití pensar sin objetivo alguno, sin presión, sin expectativas de resultados? Poderosa pregunta, ¿verdad? Vamos ahora a la segunda modalidad, y es la dispersión masticadora de problemas. A diferencia de la anterior, en este caso, veíamos que en el punto anterior era completamente libre, y ahora esta consiste en mantener un problema específico en la periferia de tu atención mientras realizas otras actividades que requieran poca concentración.
Speaker B:
Es como poner un problema a fuego lento en la parte trasera de tu estufa mental. La ciencia detrás de esto se conoce como el efecto Zeigarnik, que describe cómo nuestro cerebro sigue trabajando en problemas no resueltos, incluso cuando no estamos de manera consciente pensando en ellos. La razón por la que las mejores ideas llegan en la ducha mientras caminas, o justo antes de dormir, es porque en esos momentos tu mente está en modo dispersión, pero con el problema aún activo en segundo plano. Esto me recuerda a la famosa recomendación de Thomas Edison, el inventor, quien decía que nunca deberías irte a dormir sin dar una tarea a tu subconsciente. Edison sabía que mientras dormimos, nuestra mente procesa los problemas desde ángulos diferentes. De hecho, muchos de sus inventos surgieron después de plantear una pregunta específica antes de acostarse y permitir que su mente divagara y trabajara en ella durante la noche. Lo fascinante es que según investigaciones recientes que comentamos al reseñar el libro Hiper focus de Chris Bailey para nuestro tenso círculo, por cierto, damos la bienvenida a César Pallares y Sara como nuevos miembros, esta modalidad de pensamiento es muy efectiva para resolver problemas que requieran de tu creatividad. De hecho, los participantes que intentaron resolver problemas de intuición creativa durante sus horas de menor rendimiento cognitivo, es decir, cuando su nivel de alerta era más bajo y su mente más propensa a divagar, obtuvieron mejores resultados que aquellos que intentaron resolverlos durante sus horas de picos de concentración.
Quique Gonzalo:
Es como si tu mente analítica, cuando está demasiado alerta, bloqueara las conexiones inesperadas que conducen a soluciones innovadoras. El tercer y último modo de trabajo es la dispersión habitual, Y es que esta ocurre cuando realizas tareas repetitivas que requieren cierta atención, aunque dejan espacio mental libre. Lavar los platos, caminar, doblar la ropa, conducir por un camino que conoces, todas estas actividades crean el entorno perfecto para que tu mente se mueva entre la tensión parcial a la tarea y la libertad para divagar. Este tipo de dispersión es es en especial valiosa, porque mantiene tu cuerpo en movimiento mientras libera tu mente, y esto consigue crear un estado de flujo que facilita las conexiones creativas. Aquí te recomiendo una práctica, que es simplemente establecer paseos sin un destino específico, sin música, sin podcast, ni el de KENSO, sin nada más que tus pensamientos. Déjate llevar. Durante este paseo no intentes dirigir tu pensamiento, tan solo permite que vaya bombardeando de manera en libertad, observando dónde se va posando tu atención. Porque te vas a sorprender al descubrir cuántas conexiones valiosas emergen cuando le das a tu mente ese espacio para respirar.
Quique Gonzalo:
El aburrimiento es un recurso escaso. Este recurso se ha vuelto tan escaso que casi podríamos llegar a considerarlo un lujo. Sí, ya lo sé que puede llamar la atención. Pero es que simplemente el otro día paseaba con Yago, con mi hijo y con Lua por un parque cuando escuché una conversación entre una madre y sus 2 hijos adolescentes. Mamá, nos estamos aburriendo. Se quejaban mientras le devolvían el móvil que se había quedado sin batería. Y mi primera reacción, que me sorprendió incluso a mí mismo, fue de envidia profunda, porque como la mayoría de los adultos, hace años que no me aburro de verdad, hace años que no me aburro como me aburría cuando iba al pueblo en vacaciones. El aburrimiento, ese estado incómodo que intentamos evitar a toda costa, es en realidad un nutriente esencial para tu cerebro.
Quique Gonzalo:
Es el espacio vacío donde germina la creatividad. Así que te propongo un pequeño reto. La próxima vez que sientas ese impulso automático de sacar el móvil, ya sea que estés en una sala de espera en el autobús, en el metro, mientras esperas a un amigo que llega tarde, resiste. Permítete aburrirte, deja que tu mente divague, porque no vas a estar perdiendo el tiempo. Lo que estás haciendo es crear el espacio mental necesario para que surjan conexiones inesperadas. En nuestro nuevo curso, cuando la concentración se vuelve superpoder, aunque parezca contradictorio, hablamos de los beneficios de la mente dispersa y al mismo tiempo de anunciar un curso sobre concentración, ¿verdad? Pero aquí está la paradoja, y es que solo cuando dominas el arte de la concentración profunda, puedes valorar y aprovechar de manera plena el poder de la dispersión mental. Son 2 caras de la misma moneda, son 2 habilidades complementarias que juntas crean una mente extraordinariamente efectiva. Así que en este nuevo curso que hemos lanzado para ti, mejora tu concentración, ya de la atención, tu superpoder, te está esperando en queso punto es barra curso guion concentración.
Quique Gonzalo:
Te vamos a guiar a través de 11 módulos para desarrollar una mente capaz de concentrarse cuando sea necesario y capaz de dispersarse cuando sea más valioso. Porque la verdadera efectividad no consiste en estar siempre concentrado, sino en saber cuándo concentrarse y cuándo permitir que tu mente divague con propósito. Te estarás preguntando, oye, pero con tantas distracciones, ¿cómo puedo siquiera empezar a controlar mi atención? Esa es precisamente la pregunta que responde nuestro curso, porque en un mundo diseñado para fragmentar tu atención, simplemente la capacidad de aprender a dirigirla de manera consciente, ya sea hacia una tarea o hacia un estado de dispersión creativa, es quizá la habilidad más valiosa que vas a poder desarrollar. Así que te propongo una práctica para empezar hoy mismo, porque no quiero que termines este episodio solo con ideas interesantes, sino que puedas llevarlas a la acción. Quiero una práctica muy concreta para ti que puedas implementar ahora, y esta es mi propuesta. Dedica 10 minutos esta noche antes de dormir a un aburrimiento intencional, sin móvil, sin libros, sin música, sin pantallas, solo tú, tus pensamientos, tus emociones, quizá mirando por la ventana o el techo, simplemente, recostado en la cama con los ojos abiertos. De hecho, ya sabes que en Holanda tiene una palabra preciosa para esto, el Nixen, que significa literalmente no hacer nada. Y los holandeses han elevado esta práctica a la categoría de arte, reconociendo su valor para el bienestar mental y la creatividad.
Quique Gonzalo:
Mientras nuestra cultura glorifica el estar ocupado, ellos han conservado este espacio para el pensamiento libre. Así que no intentes meditar ni concentrarte en la respiración, nada. Aquí, al contrario, permite que tu mente vague libremente. Lo único que te pido es que observes sin juzgar a dónde se dirige tu atención. Es posible que al principio sientas un poco de ansiedad, incluso un ligero pánico a qué está pasando aquí, y es que estamos tan acostumbrados a la estimulación constante que estos momentos de vacío pueden resultar incómodos. Pero persiste, Y es que esa incomodidad es la señal de que estás ejercitando un músculo mental que a lo mejor se encuentra un poquito atrofiado. Ya vas a ver que con el tiempo estos 10 minutos de aburrimiento intencional van a convertirse en 1 de los momentos más valiosos de tu vida. Así que vamos a cerrar el círculo, entendiendo que vivimos en un mundo que adora la productividad visible, los resultados cuantificables, la concentración inquebrantable, y todo esto tiene su valor.
Quique Gonzalo:
Pero al mismo tiempo, no ignores que algunas de las ideas más revolucionarias, de las conexiones más profundas, de los momentos más significativos de tu vida, ocurren, han ocurrido y ocurrirán justo cuando tu mente no se encuentre enfocada en una tarea específica, sino vagando libremente por el paisaje de tus pensamientos. Así que recuerda, programa en tu agenda tiempos de no productividad. Ya sé que esto a lo mejor parece contraintuitivo, pero te va a llevar muchos más lejos. Son momentos dedicados y diseñados a no hacer nada en particular, Tan solo permitir que tu mente divague, no para escapar de tus responsabilidades, sino para nutrirlas con una perspectiva fresca y creativa. Porque a veces, para avanzar más rápido, necesitas detenerte. Hoy mismo, antes de que termine el día, identifica una actividad rutinaria que vas a realizar mañana. Quizás tu ducha matutina, el trayecto al trabajo o los 15 minutos antes de dormir, y decide, de manera consciente, convertirla en un espacio de dispersión mental, sin distracciones digitales, sin objetivos específicos, solo tu mente en libertad. ¿Y quién sabe? Tal vez en ese espacio, aparentemente improductivo, surja esa idea que lo cambie todo.
Quique Gonzalo:
Tu mente dispersa no es un defecto que corregir, sino un recurso que aprovechar. Así que hoy terminamos, como siempre, con un nuevo hábito tenso, desconecta para reconectar. Nos escuchamos pronto.
Únete a KENSO Círculo
El club para personas centradas en mejorar su efectividad y vivir más felices.
Un club a tu alcance porque a partir de 1,5€ al mes tendrás acceso prioritario a los episodios del podcast sin publicidad, podrás descargar el superguión para cada episodio, recibirás cada mes un episodio especial donde haremos una reseña sobre un libro de efectividad, puedes participar en KENSO Lab para juntos crear hábitos efectivos, recibirás el newsletter semanal, podrás participar en el grupo de WhatsApp, disfrutarás de descuentos en los servicios de KENSO y de nuestra eterna gratitud por ayudarnos a mejorar.